
Ahora sí que sí. Ya no hay tiempo para más pruebas. El Real Madrid completó en la mañana del viernes el último entrenamiento –a puerta cerrada- antes de medirse el sábado (20:00 horas, PPV) al Barcelona en el Santiago Bernabéu con media Liga en juego. Los 22 efectivos disponibles se pusieron a las órdenes de Juande Ramos para ultimar la estrategia con la que intentarán asaltar a los azulgranas y ponerse a un solo punto del liderato. Las ausencias de la mañana volvieron a ser la de Sneijder y Guti, que no saltaron al césped y completaron trabajo de recuperación en el interior de las instalaciones.
Ha comenzado la cuenta atrás. Ya se cuentan las horas para que el Bernabéu se engalane y reciba, de blanco impoluto, al F.C. Barcelona. Son tres puntos, pero todo el mundo sabe que sobre el verde del coliseo se pondrá en juego más de media Liga. De imponerse en el Clásico, los madridistas se colocarían a tan solo un punto del líder a falta aún de otros cuatro partidos que quedarían por disputarse. Así que si los Madrid-Barça son siempre especiales, el de este sábado (20:00 horas, PPV) lo será aún más. Toca ganar o ganar. No existe otra posibilidad ni otro resultado si el equipo quiere demostrar con contundencia que quiere esta Liga.
Así pues la concentración de la plantilla roza máximos. Todos están convencidos de que la victoria es posible y con ese único objetivo han trabajado con intensidad durante toda la semana. La de este viernes, a puerta cerrada, se convirtió en la última sesión de entrenamiento para los hombres de Juande Ramos. El técnico hizo hincapié hasta en el más mínimo detalle. No quiere que tácticamente nada quede en el aire, aunque sabe que en este tipo de partidos también existe un factor que escapa a las pizarras. Y ese lo tiene ya ganado el Real Madrid. Por ganas, por concentración, por la afición…
Robben, con el grupo por segundo día consecutivo
Se convirtió un día más en el nombre destacado de la jornada. Arjen Robben ha destrozado los pronósticos sobre su recuperación, que anunciaban de dos a tres semanas de baja. Mención especial para el trabajo de médicos y fisioterapeutas, que han hecho un trabajo espectacular con el holandés. Las ganas de vestirse de corto en el Clásico han hecho el resto. Superada la rotura fibrilar grado I 1/3 medio en el músculo tríceps sural de su pierna derecha, Robben se antoja incluso titular ante el Barcelona.
El extremo se ejercitó sin molestias al mismo ritmo que el grupo. Sobre el césped los 22 efectivos disponibles. Por un lado los jugadores de campo, que completaron carrera continua y distintos ejercicios para trabajar la explosividad en carrera. Por otro los porteros. Casillas, Codina y Dudek se ejercitaban a las órdenes de Pedro Jarro. Más tarde, los petos y los esféricos que colocaba Juande sobre el verde pronosticaban lo evidente. Balón, balón y balón. Partidillo para ultimar la estrategia y hasta el más nimio detalle.
Las dos únicas ausencias volvieron a ser las de Sneijder y Guti, ambos lesionados. El holandés sufre una rotura muscular de grado II en el músculo del bíceps femoral izquierdo desde el pasado 18 de abril. A pesar de que el miércoles ya saltó al césped para correr en solitario, el centrocampista continúa con trabajo específico de recuperación. Mismo plan para Guti, que protagonizó la peor noticia de la sesión del miércoles al finalizar con un esguince de grado II en el ligamento lateral externo de su tobillo izquierdo sin afectación ósea, que le obligará a perderse el Clásico.
Comentarios