El técnico del Real Madrid, José Mourinho, explotó por la actuación del colegiado Stark en el partido frente al Barcelona. No hizo falta ni preguntarle: "Si digo lo que pienso acaba mi carrera hoy. Sólo dejo una pregunta: ¿Por qué? ¿Por qué Ovrebo, De Bleeckere, Busacca o Stark? En cada semifinal pasa lo mismo. Estamos hablando de un equipo, el Barça, absolutamente fantástico, pero, ¿por qué no pudo ir a la final el Chelsea hace dos años? ¿Por qué el Inter se salvó haciendo el verdadero milagro de aguantar con diez tanto tiempo? El partido iba para un 0-0 e iba a entrar Kaká por Lass... No sé si es por el poder de Villar en la UEFA o por UNICEF. No lo entiendo. Enhorabuena por su equipo, pero también por todo su poder, que debe ser difícil de conseguir".
"En cuanto echaron a Pepe quedaron solucionados todos sus problemas. Si deportivamente parece difícil remontar, ahora diría que es misión imposible. Tienen que llegar a la final y ya está. Puedo vivir toda mi vida con ello, pero espero tener la respuesta algún día. ¿Por qué necesita este equipo algo que es obvio para todos? Sólo el árbitro puede responder pero no lo va a hacer. A lo mejor quedamos 0-0 y el segundo lo ganan ellos y no pasa nada. Lo aceptaríamos con fair play", añadió.
Mourinho se mostró muy pesimista sobre las opciones del Madrid: "Estamos eliminados. Iremos a Barcelona con orgullo y respeto por el mundo del fútbol, que a veces me da asco. Iremos sin Pepe ni Ramos, que no hicieron nada, sin el entrenador y con un resultado casi imposible. Y si hacemos un gol allí, nos matarán otra vez. No tenemos ninguna posibilidad".
"Si la gente del Barcelona es honesta, sabe que esto está pasando. Pueden esconderlo, pero seguro que no son mala gente y saben que ganar así no tiene el mismo sabor. Cuando Gourcouff hizo aquella mano en Lyon que Stark no pitó, dije que no la había visto. Igual no nos quería ni en cuartos. Lo del árbitro fue increíble", añadió.
Y lanzó otra brutal andanada a Guardiola: "Yo gané dos Champions en el campo, con dos equipos que no eran el Barça: el Oporto, de un país que normalmente no gana estos títulos, y con el Inter, que llevaba cincuenta años sin conquistar la Copa. Y lo hicimos con esfuerzo y sacrificio. Guardiola es un entrenador fantástico pero ha ganado una Copa de Europa que a mí me daría vergüenza ganar y puede conquistar otra que a mí también me daría vergüenza ganar. A Guardiola le respeto porque su trato ha sido siempre fantástico. Creí que podía tutearle, pero parece que no. Ojalá gane un día una Champions sin escándalos".
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